Como hablas... ¿escribes?

      La imaginación nos lleva a lugares que quizá nunca lleguemos a vivir realmente pero ¿A quién no le gusta imaginar cosas, situaciones, circunstancias y hasta personas?

      Algunos considerarán una locura lo que otro imagina, eso mismo pasa con las palabras que plasmas en un papel, pueden venir de tu imaginación o bien de alguna realidad, pero no a todos les gusta lo que escribes.

      Muchas mentes retorcidas (en las cuales orgullosamente me incluyo) suelen escribir temas sobre en los cuales la gente no quiere envolverse, como la muerte, la destrucción, la desesperación, el miedo, pero que sin embargo causan interés y pueden abrir puertas en nuestras mentes incapaces quizá de percibirlas.

      Cierto día leía, que un joven al terminar de leer un libro comenzó a imitar todas las acciones que el protagonista asesino de aquel libro relataba, ¿asombroso? quizá no, ya que de alguna mente retorcida salió toda esa que invención o no, plasmado estaba y dispuesto a ser leído.

      Supongo que el autor se sintió en el fondo (pero muy en el fondo), alagado con la hazaña de aquel chico (yo me sentiría así), sin embargo no lo diría y se justificaría de algún modo deslindándose de responsabilidades (cosa que yo también haría, ¡ja!).

      En mi caso, plasmo situaciones extremas de mi vida usando mi imaginación, pero soy muy diferente al hablar, claro que no por ello dejo la imaginación de lado, ¡jeje! existen muchas ocasiones en las que hablo e imagino al mismo tiempo y creánme que es una mala combinación, solo me hace ver como loca riéndome sola.. no sabría como explicarlo, son cosas que jamas diría, ya que suelen ser desquiciadas o realmente estúpidas, que me colocaría en un rango en el que la gente simplemente me vería como una demente -se posiciona en cuclillas, toma sus piernas dobladas y se ríe, mirando al vacío-, ¿ven a lo que me refiero? ¡jajaja!

      En conclusión, creo que el autor se expresa mas plenamente en un papel que verbalmente, y no porque no sea capaz, sino porque el papel nos vuelve mas abiertamente sinceros.

Sep'10/JN